Ante un imponente marco de público, se llevó a cabo anoche el cierre de los Carnavales 2022.
Miles de personas poblaron las calles céntricas de la ciudad para jugar y divertirse con espuma, además de aplaudir a cada disfraz, carroza e integrante de las comparsas «Flor de Liz» y «Papelito» y la murga «Ritmo de Pueblo» de San Manuel, que le dieron vida a esta edición de los corsos.
Además, anoche se sumaron integrantes de las demás comparsas que había decidido no participar de los carnavales por la situación epidemiológica.
Finalizado el desfile de las comparsas, la multitud se trasladó a la primera cuadra de Avenida San Martín, frente al palacio municipal, para darle vida a la inigualable fiesta de la espuma, previo a la gran quema del Rey Momo, que como todos los años fue confeccionado por la Asociación Amigos de los Niños.
Cuando las llamas envolvieron al gran Momo, grandes y chicos aplaudieron y gritaron, despidiendo al Carnaval.
La nota negra de la jornada la dieron algunos irresponsables que decidieron lanzan tarros de espuma al fuego, poniendo en riesgo a las familias que estaban disfrutando del momento.
Lamentablemente al explotar de uno de los tarros, una parte del mismo dio sobre el rostro de una niña, que fue atendida en el Hospital Municipal, por suerte, sin daños de gravedad.