En medio de una de las más importantes crisis económicas que se recuerden en las últimas décadas en nuestro país, en la ciudad de Lobería está en plena construcción una de las obras de infraestructura más importante en cuanto a tamaño se refiere.
Estoy hablando de la construcción de un enorme edificio en la esquina de Avenida Campos y 9 de Julio, donde funcionó el histórico ABC.
Será esta la segunda edificación de estas dimensiones en la ciudad de Lobería.
Debemos remontarnos al año 1971 para encontrar una inversión similar, en la que fue la construcción del primer y único edificio hasta la actualidad de la localidad. Hablamos del histórico Edificio «Avanzada», que se concretó merced a la iniciativa del escribano Harold Goyhenespe, con la financiación del Banco Comercial de Tandil.Es por eso que hoy celebro que otro loberense soñador, como lo es Andrés Villalva, aún cuando desde hace décadas reside en otra ciudad, haya decidido invertir en Lobería, con todo lo que ello supone y más en momentos económicos tan duros, donde la obra pública difícilmente pueda prosperar, según lo anunció el propio presidente de la Nación.
Sin dudas, el sector de la construcción es un pilar fundamental para la activación económica, ya que se trata de una de las industrias con mayor capacidad de generación de empleo.
Adicionalmente, es uno de los principales motores de la economía puesto que beneficia a numerosas ramas del sector industrial, entre las que destacan la industria del acero, hierro, cemento, arena, cal, madera y aluminio, así como a sectores de servicios afines como el alquiler de maquinaria para la construcción y otros.Además de los beneficios mencionados, debe destacarse el hecho de que una esquina que fue histórica para Lobería y que está ubicada en pleno centro, estaba abandonada desde hace décadas y ahora se transformará en un moderno edificio, lo que supone un notable avance para la ciudad.
Aprovechando este comentario, me gustaría destacar también la finalización de una obra que estuvo parada durante décadas y que también le ha mejorado “la cara” a la localidad. Se trata del edificio, mucho más chico por cierto, que se terminó de construir el último año, pegado al Avanzada, habiendo quedado hermoso, ofreciendo numerosos departamentos y locales comerciales en su planta baja.También me parece un momento propicio para mencionar otro ambicioso proyecto que surgió hace varios años y que generó un importante debate en la sociedad y en el Concejo Deliberante entre los que lo apoyaban y los que se oponían, el cual contemplaba la construcción de dos torres sobre calle Ameghino, donde funcionara hasta fines de la década del ’80 el antiguo Colegio Nacional. Esa obra quedó a medio terminar, casi abandonada, dando una mala imagen y transformándose en una nido gigante de palomas y ratas. Deseamos desde este lugar que los inversionistas puedan retomar esa obra y lograr finalizarla.
Por lo pronto, más allá de esta última referencia, deseo celebrar que sigan apareciendo inversores como el mencionada Villalva, que apuesten por Lobería y su desarrollo.
Carlos Laboranti, director ejecutivo.