Posiblemente la inauguración de una gran obra tenga más impacto en la comunidad, pero lo sucedido en la semana en San Cayetano, creo que no debe dejarse pasar como una simple noticia más.
El Hospital Municipal de San Cayetano ya cuenta con el tomógrafo computarizado que había sido adquirido meses atrás, lo que sin dudas es un enorme avance para el Sistema de Salud Pública de la localidad.
Si bien el nosocomio sancayetanense ha ido incorporando tecnología de manera permanente, este es un paso muy importante, puesto que hasta el momento, aquel vecino que necesitaba practicarse un estudio de alta complejidad con la mencionada aparatología, necesitaba indefectiblemente trasladarse hasta otras ciudades, con el trastorno que esto implica; conseguir turnos, gastos importantes, pedir el día en el trabajo o reprogramar tareas.
Todo esto se evitará ahora al contar con un tomógrafo en la propia ciudad y lo más importante, con la incorporación de este equipo de imágenes, los sancayetanenses podrán acceder a un diagnóstico más rápido y preciso, lo cual es beneficioso para el posterior tratamiento.
Los propios especialistas han destacado que este tipo de estudios se utilizan a diario para patologías diversas, desde traumatismos, hasta procesos infecciosos y seguimiento de pacientes.
Volviendo al primer párrafo de este editorial, en poco tiempo, la Municipalidad de San Cayetano inaugurará el Centro de Diagnóstico por Imágenes, obra en la que se viene trabajando desde hace algo más de un año y medio, lugar que contará con una sala de recepción y sala de espera, office y vestuario para el personal, sala de Rayos X, tomografía, mamografía, ecografía con sus respectivos baños, área de digitalización y depósito para insumos.
Sin dudas será un lugar imprescindible para la salud de los sancayetanenses. Pero de nada serviría la construcción de un hermoso y moderno edificio, sin la costosa aparatología que se necesita para su funcionamiento.
Es por eso que deseaba detenerme en esta noticia que seguramente no generó la repercusión que si producen las grandes inauguraciones, pero que tendrá un impacto directo en la vida de los vecinos de San Cayetano.
Nadie estará deseoso de utilizar este aparato que fue adquirido por más de 20 millones de pesos, pero quien lo necesite, seguramente estará agradecido de los trastornos que se evitará y la rapidez con la que podrá acceder a sus estudios.
Carlos Laboranti, director ejecutivo.
