Ocurrió en Miramar, donde el oficial Braian Erreguerena logró mediante RCP, que un bebé de 9 meses recuperara sus signos vitales, tras haber caído en un balde con agua.
La situación fue dramática, pero tuvo un final feliz.
El policía loberense Braian Ezequiel Erreguerena se encontraba prestando servicio en el destacamento del barrio Las Flores, de Miramar, cuando cerca de las 15,30, un hombre y una mujer llegaron desesperados con su bebé de 9 meses sin signos vitales.
Según se supo, el mismo había caído en una balde de 20 litros lleno de agua, y cuando su madre lo encontró ya no respiraba.
Inmediatamente, el policía de nuestra ciudad, ubicó al pequeño sobre un banco y comenzó a practicarle reanimación cardiopulmonar, logrando la rápida reacción del niño. Posteriormente, lo puso de costado para que pudiera despedir el agua que pudiera haber tragado, y en un móvil policial lo trasladaron hasta el hospital “Marino Cassano”, donde el propio policía ayudó a sacarle la ropa. Durante el trayecto, el bebé respiraba cada tres segundos aproximadamente, y la tranquilidad para todos llegó cuando en el nosocomio, el pequeño logró vomitar y llorar.
El propio Erreguerena junto a otros compañeros del mismo destacamento policial, le brindaron una gran contención a los padres del bebé, que estaban absolutamente shockeados por la situación.
Abuela agradecida
La abuela del pequeño, Claudia Coria, dialogó con Radio Brisas de Mar del Plata, donde expresó que “este policía fue el héroe que lo salvó”.
Acerca del hecho, contó que “fue un descuido, el balde era de 20 litros y era más pesado que la misma criatura”.
La abuela contó que “cuando Antonhy pegó un grito en el hospital y vomitó, lloramos todos, inclusive los policías que nos habían acompañado. Ahora él está recuperándose con su mamá”.
Vale destacar que una vez estabilizado y ya fuera de peligro, el niño fue trasladado al Hospital Materno Infantil de Mar del Plata.
Foto: Braian Erreguerena