Un marco de público imponente acompañó los festejos de Carnaval desarrollados, mayoritariamente, en inmediaciones al Paseo Frente de Vías. Calles pobladas, rostros sonrientes, guerra de espuma, patios de comida trabajando a pleno y la satisfacción de volver a festejar: sensaciones que se compartieron entre quienes vivieron y disfrutaron la noche.
Pasadas las 20,30, desde el Espacio Cultural partieron las “estrellas” de la noche. Un ruidoso y colorido desfile de murgas, comparsas, instituciones y artistas fueron contagiando a su paso el espíritu carnavalesco.
Por un momento, las calles 9 de Julio y Avenida San Martín rompieron con su habitual rutina para recibir la poblada caravana. El sonido incomparable de los instrumentos de percusión Samba Reggae, guiaba al resto de los participantes. Fuerza, ritmo preciso y coordinado se unieron en esta agrupación independiente que sostienen la idea que los tambores nos igualan y la música nos hermana.
Detrás de ellos la delegación del Jardín Nº 901, encabezados por un gran dragón, y un mensaje esperanzador “no importa cuán difíciles sean los tiempos que puedan venir, lo importante es permanecer unidos en la adversidad para vencer el miedo».
Los colores rojo y blanco reflejados en la indumentaria, banderas y paraguas se hicieron presentes luego con la escuela de fútbol infantil del Club Sportivo, de la cual participan en la actualidad unos 200 chicos.
La carroza del Espacio Cultural Municipal, construida por responsables y talleristas de Teatro de adultos, danzas contemporáneas, salsa, folklore para adultos, viejos activos y divertidos y Papelnonos recibieron su reconocimiento a lo largo del recorrido. La danza, la música y el atuendo colorido de Papelnonos representaron en esta oportunidad al carnaval del norte argentino
Las diablitas y diablitos del Jardín Nº 902 se hicieron presentes también en esta celebración; “compartir estos momentos es enseñar y poner a disposición un legado cultural, sin olvidarnos de nuestras raíces”.
Con el entusiasmo y alegría que merecen los festejos de Carnaval, el fútbol infantil de Independiente paseó sus colores azul y blanco, en el año de su centenario.
Provenientes de Lobería, la comparsa Papelito pintó de celeste y blanco la ciudad de San Cayetano. Y además, homenajeando las raíces y nuestras tradiciones, dos pequeños integrantes interpretaron un malambo.
Al igual que en la villa balnearia, y en cada carnaval que se ha realizado en San Cayetano, el grupo Envión se hizo presente. Esta vez pensada desde los mismos jóvenes, desde sus propias evoluciones, la transformación en todos sus aspectos.
La renovada murga local «Mira mis guantes» volvió con todo. Con los mismo colores: rojo, azul, negro y blanco; con energías renovadas, con ritmo y cachengue. Unidas en esta ocasión con la murga «Hoy bailaré» de Necochea/Quequén, quienes además de regalar alegría en cada presentación, tiene como objetivo fomentar la cultura, el deporte e instan a los jóvenes a culminar sus estudios.
Por si faltaba algo para ver y asombrase, hizo su aparición, “La Feliz Comparsa”. Compuesta por más de 80 personas (bailarines, pasistas y batuqueros), estos marplatenses se destacaron por el virtuosismo de la batucada y sus excelentes trajes. Presentando «El circo de la Feliz», una moderna y pujante comparsa que maravilló a los sancayetanenses.
En el predio ya nadie sentía frío, solo se hablaba de la calidez y calidad de los espectáculos… y apareció «La troupe de los autos locos» de Lincoln, una flota de autos especiales que sorprendieron con graciosas y alegres piruetas sobre ruedas. Invitando además al público a formar parte de un “paseo”, invitación que aceptó el intendente Miguel Gargaglione.
Cerrado el desfile llegó el momento en que se dejan (o desean dejar) las cosas del pasado y las ilusiones se renuevan, la quema del Rey Momo elaborado en el Espacio Cultural. Con una multitud esperando el ansiado instante en que se derrumbe el “ojo covid”, (y los bomberos atentos a cualquier inconveniente) las llamas se apoderaron de la estructura, los celulares captaron el momento en que se transformó en ceniza, y un aplauso cerrado coronó la quema.
Los festejos siguieron sobre y debajo del escenario. El grupo platense “Versión Cumbia” brindó un show impecable, con versiones de cumbia de temas pop y rock que el público bailó hasta su finalización. Y luego los Djs de Sancumbyetano que continuaron alegrando la noche.