Un fuerte debate generó en la sociedad la decisión del intendente Juan José Fioramonti de no firmar el convenio mediante el cual la Municipalidad de Lobería le permitía a la Provincia disponer de camas extra hospitalarias para pacientes de otras localidades con coronavirus.
En ese sentido, esta mañana, el secretario de Gobierno, Pablo Barrena, enfatizó que «no es una cuestión de egoísmo, sino es una cuestión de realidad, de imposibilidad de cumplir de esa manera con ese convenio».
El funcionario explicó que «el convenio establecía que la utilización de las camas sería para personas que dieron Covid-19 positivo, pero además de ocupar el lugar hay que asistirlas con alimentación, con limpieza, con cuidado de personal, y todo ello lleva una complejidad que desbordaría nuestras posibilidades. Esos lugares, las autoridades sanitarias locales las habían previsto como lugares de aislamiento pero no de pacientes de Covid confirmados, sino aislamiento de personas que por ejemplo vengan de un lugar donde hay transmisión comunitaria y no tienen lugar en su casa para poder aislarse y eventualmente no contagiar a su familia. Es decir, personas sanas, que pueden deambular, y que lo único que necesitan es que se le lleve la alimentación. El convenio se refiere a usar el lugar para personas con Covid. Por eso decimos que Lobería no está preparado para cumplir ese convenio, porque no preparamos esos centros para esa situación».
Más allá de la decisión de no firmar el convenio, Barrena dejó abierta la posibilidad de rebricarlo en caso de que el mismo sea reformulado. «Los intendentes y secretarios de Salud realizaron una reunión por Zoom y le pidieron al ministro de Salud de reformular el convenio para establecerlo de una manera solidaria pero que sea posible de cumplir para los distritos chicos del interior. El ministro de Salud se comprometió en revisarlo y plantearlo de otra manera para compatibilizar los intereses de todas las partes» sostuvo.
