Con una retroexcavadora y personal municipal, se está terminando una obra en un sector postergado y en la que los vecinos observaban como en cada lluvia, sus calles se inundaban. “Se fueron levantando las cañerías que estaban en contrapendiente y sacando la tierra de los caños con mucho cuidado para que no se rompan” enfatizó el director de Infraestructura, Marcelo Gómez.
Con personal y maquinaria municipal, se avanza a paso firme con los últimos metros de la obra pluvial en calle 62 entre 87 y av. 91, para dar así respuesta a un sector de la ciudad muy postergado y que veía como en cada lluvia su barrio se inundaba.
En este contexto, el director de Infraestructura, Marcelo Gómez, señaló que “de 87 a 89 se fueron levantando las cañerías que estaban en contrapendiente” al tiempo que “también se está sacando la tierra de los caños con mucho cuidado para que no se rompan porque para eso hay que retirarlos”.
“Ahora mismo, estamos a solo 30 metros de llegar a la 91 y terminar esta obra que es complicada para hacer y que estamos encarando con una retroexcavadora y personal municipal” adelantó luego.
Luego, el funcionario de Obras Publicas que coordina desde su Dirección este tipo de tareas en la vía pública, indicó que “es una zona donde hay cañería de 800 de hormigón que estaba mal colocada, lo que ocasionaba que en 91 entre 62 y 64 se inunde porque el agua estaba imposibilitada de correr por el pluvial tapado”.
Asimismo, manifestó Gómez que en 62 y 91 “está previsto hacer una cámara de enlaces con sumideros y después, sobre 91 entre 62 y 64, irían 120 metros de cañería de 600 para darle una terminación a la obra”.
Para cerrar, aseguró que “estamos por resolver una problema en una zona muy castigada de hace tiempo y en la que los vecinos no tenían cómo salir cada vez que llovía”.