La profesora Mónica Bouyssede recibió la distinción María Elena Walsh “por sus acciones en favor del desarme de la población civil”. En La Plata expresó que “trabajamos incansablemente para generar concientización y preocupación sobre la problemática de las armas de fuego en nuestro país”.
Las mujeres reconocidas por su trabajo solidario fueron Evelina Cabrera, presidenta de la Asociación Femenina de Fútbol Argentino, y Mónica Bouyssede, impulsora de proyectos educativos de concientización para el desarme.
Mónica Bouyssede, madre de Alfredo Marcenac, quien fue asesinado con un arma de fuego el 6 de julio de 2006, es Socióloga, profesora de Educación Superior y forma parte de Equipos de Orientación de Escuelas Secundarias. Luego de la tragedia de su vida, decidió transformar su dolor en un trabajo tenaz y sostenido a favor del desarme y la educación para la paz, para alcanzar una sociedad de pleno ejercicio de los derechos humanos, en Necochea.
“Me honra profundamente. Trabajamos incansablemente para generar concientización y preocupación sobre la problemática de las armas de fuego en nuestro país”, dijo Mónica emocionada. Por eso, este reconocimiento, subrayó Bouyssede, “es una puerta importante que se abre para trabajar estas problemáticas, porque estamos en el lugar donde se piensan y discuten las políticas públicas”.