«¿Qué me pongo para ir al gimnasio?», es una pregunta recurrente de alguien que recién se inscribe al gym. A veces la estética es primordial para la persona, que decide invertir dinero en ropa canchera, pero lo cierto es que lo más importante es la comodidad y que la indumentaria deportiva elegida se adapte bien al cuerpo y a la actividad a realizar, para evitar problemas musculares.
Calzas, shorts, tops y corpiños deportivos, remeras, musculosas, camisetas -de mangas largas y mangas cortas-, zapatillas, relojes smart, y riñoneras son parte de los outfits que hoy lucen los que hacen ejercicio en la vía pública o en el gimnasio.
No solo debe ser cómoda, sino que es una buena idea elegir colores fuertes que motiven e incentiven a la persona. Hoy en día existen infinitas opciones en casas de lujo como Stella McCartney, Louis Vuitton y Chanel, que cuentan en sus colecciones líneas sporty o «activewear», pero lo cierto es que las más elegidas son hasta las marcas deportivas clásicas como lo son Adidas, Nike, New Balance, Under Amour y Reebok, entre tantas otras.
Pero por encima de la estética y la combinación de colores y los estampados, la comodidad determina la calidad del entrenamiento. La primera recomendación es que de poco sirve utilizar talles más pequeños con tal de marcar aún más la cintura, las caderas, los pechos o los glúteos. Por lo tanto, la elección del talle es fundamental.
Tanto la prenda superior como la prenda inferior deben ser de tejidos finos y transpirables ya que el cuerpo va a generar sudor y transpirar.
La ropa es recomendable que sea dry fit porque se seca la transpiración más rápido y evita que la persona siga la actividad deportiva toda mojada. La única contra es que estas prendas son más caras, pero como recomendación es mejor tener una de esta y no cinco de otra.
Lo ideal de la ropa es que nada apriete. En mi caso como personal trainer, ni costuras, ni elásticos. Sobre todo tiene que ser una ropa con la que no te tengas que estar acomodando todo el tiempo. Para el verano, calzas cortas, shorts y corpiños deportivos que sujeten bien los pechos y musculosas cortas y también largas. Para el invierno, pantalones largos estilo de joya de telas finitas con buzos finitos. Lo completo con chaleco y camperita liviana de pluma y cuido mi garganta con un cuellito o pañuelo.
La elección de las zapatillas. El calzado para empezar con la práctica de un deporte es fundamental. Dependiendo de la actividad física que se realice, el calzado variará. Hay zapatillas de training y running. No sirve hacer ejercicio con zapatillas de lona o sin rebote.
Si la elección de las zapatillas no es correcta, las rodillas son las que más sufren. Si la actividad que se elige es correr, éstas tienen que ser especiales y tener en cuenta la pisada. Para el resto de las actividades, solamente que queden cómodas y no lastimen.
Claudia Lescano – Preparadora física de alto rendimiento