Los niños loberenses vivieron una tarde-noche de domingo maravillosa, gracias a la organización de la Asociación Amigos de los Niños.
Desde las 14 y hasta las 18, la entidad posibilitó que los chicos disfrutaran de toboganes inflables acuáticos.
Tras un impasse para que los niños se cambiaran tras una tarde de diversión con agua, llegaron los Reyes Magos y les entregaron bolsitas con golosinas a miles de chicos que hicieron la cola ordenadamente junto a sus familias.