La intensa cartelera deportiva del lunes en Mar Del Plata por la tercera jornada de los Juegos Bonaerenses, también dejó la palabra de algunos de los protagonistas de Necochea, que dejaron la piel en su tarea, ya sea como jóvenes competidores o también el caso de los profesores.
Un ejemplo es el de los chicos del Sub 18 de hándbol escolar, que no sólo se dieron el gusto de jugar en el Polideportivo Islas Malvinas que da a la Av. Juan B. Justo, sino que además dieron el golpe ante Florencio Varela y quedaron cerca de las semifinales. A continuación, las sensaciones de dos de los integrantes del plantel, Jerónimo Mazzacane y Tomás Hankel.
En primer instancia, Mazzacane expresó que “es algo que venimos intentando conseguir de hace muchos años con el colegio y es la primera vez que llegamos a esta etapa, ya que siempre quedábamos eliminados antes, así que muy contentos y ahora vamos por todo. Jugamos ante un equipo muy duro con jugadores de buena jerarquía y dejamos todo hasta el final”.
Con la emoción a flor de piel, describió en cuanto a lo extra deportivo que “los Bonaerenses son una experiencia increíble, tienen de todo, la competitividad entre los equipos, pero también las diferentes relaciones que se pueden afianzar entre las ciudades y los fuertes enlaces de amistad que se forman entre nuestro propio equipo”, al tiempo que dedicó el triunfo especialmente a su mamá.
Asimismo, Hankel definió que “es impresionante, me encantan los partidos duros, hoy jugamos muy bien y se destacó el juego en equipo, es un orgullo compartir equipo con estos compañeros”, mientras que definió que “vinimos con dos metas, primero llegar a semifinales, y luego salir campeones, que es lo que vamos a tratar de lograr”.
En tanto, con bastante picardía en su sonrisa, contó que “alguna que otra macana nos mandamos en el hotel (risas), pero a la vez se forman lazos muy buenos que pueden durar mucho tiempo y sabés que podés confiar en ellos pase lo que pase y eso ayuda mucho al equipo”.
En cuanto a dos de los medallistas, Carolina Gauna y Daniel Castro Palacios, ambos del atletismo PCD, estuvieron acompañados por sus familiares y no ocultaron su alegría. “Se lo dedico a Claudia Pallares, que es mi profesora”, resaltó Carlolina, para reconocer a su vez que le gusta mucho el lanzamiento de bala. “Estoy muy contenta, se lo dedico a mi mamá”, argumentó, al igual que Daniel, quien con una sonrisa de oreja a oreja, también se acordó de su entrenadora: “Se lo dedico a Claudia Pallares”.
A propósito de Pallares, desde el punto de vista de profesora, cuando fue consultada por la experiencia de los Bonaerenses, señaló que “estamos muy contentos, ha sido un año muy positivo para nosotros porque hemos traído nenes nuevos, nunca habían venido a participar y esa era la idea, traer a otros chicos que puedan empezar a acercarse al deporte de competición”.
“En este caso lo hacemos con chicos de escuela especial, que disponemos de muy poco tiempo en la escuela para hacerlo, pero así y todo hemos tenido hasta ahora dos medallas de Bronce”, añadió, por los logros mencionados anteriormente. Y sostuvo sobre estos días que “los chicos disfrutan tanto que uno disfruta a la par de ellos y estamos agradecidos al municipio por todo el trabajo por ellos”.
Finalmente, también se expresaron las chicas de cestobol, de las cuales no dudaron en encarar el micrófono Rocío Eguren y Valentina Zumárraga, quienes hicieron un análisis de los dos partidos ganados hasta acá.
“El primer partido lo jugamos contra Lanús (domingo) y estaba bastante peleado, nos faltaba un poco de confianza pero de a poco pudimos sacar una buena ventaja”, describió Rocío, quien sobre los retos esporádicos de la entrenadora Guadalupe Hernández aseveró que “no salía lo que veníamos practicando o fallaban algunas técnicas, pero pudimos ganarlo y ese era el objetivo”.
Mientras, ante el temor de Emilia Carricart frente al micrófono, su compañera Valentina manifestó que “contra Castelli empezó bastante mal el partido, pero nos fue muy bien y pudimos sacar la ventaja, aunque hubo partes en las que podríamos haber aprovechado para una mayor diferencia”.