El Tribunal Oral Federal de Mar del Plata condenó este lunes a 35 imputados, en el juicio por crímenes de lesa humanidad denominado «Subzona 15».
Después de audiencias y testimonios, los jueces Roberto Falcone, Mario Portela y Alfredo Ruiz Paz, resolvieron condenar a prisión perpetua a 28 de los 40 imputados por delitos de lesa humanidad, despojándolos de jubilaciones, retiros o pensiones; otros siete recibieron penas de entre 7 y 25 años de prisión, mientras que los cinco restantes fueron absueltos por no acreditarse la hipótesis de acusación.
Vale decir que los condenados, fueron encontrados responsables del secuestro y la desaparición de los loberenses Lidia Beatriz «Lili» Álvarez, Adalberto «Bocha» Sadet y Delia Garaguso, entre tantas otras personas.
Respecto a esta noticia, esta mañana, Bibiana Álvarez, hermana de «Lili» Álvarez, habló en Radio Ciudad y expresó sentirse «emocionada» por la decisión de los jueces: «Podemos decir que se ha hecho justicia» indicó.
Además, contó la historia de su hermana y su cuñado («Bocha» Sadet), quienes se casaron muy jóvenes, con 19 y 21 años, antes de irse a vivir a Mar del Plata, donde fueron secuestrados de un hotel el 29 de septiembre de 1976. La familia no tuvo más novedades de ellos desde aquel día, aunque décadas después, su hermana Bibiana encuentra una nota periodística en la que decía que «la crueldad es lo que le había pasado a la parejita de Lobería de apellido Sadet. Yo me quedé impactada mirando la pantalla».
A partir de ello, Bibiana se interiorizó en la causa que estaba avanzando sobre los responsables del secuestro de sus familiares, leyendo los testimonios de los juicios. De esa manera, se enteró que su hermana y su cuñado habían estado secuestrados en «El Faro» de Mar del Plata, y que había tres sobrevivientes que habían compartido con ellos esos días.
Esas personas mencionaron a Álvarez y Sadet en el juicio de diferentes maneras: «la parejita de Lobería de apellido Sadet», «el chico que el papá era poertero de un colegio» o «los chicos de Lobería». Esos testigos declararon en el juicio y afirmaron que los jóvenes loberenses fueron asesinados.
Bibiana Álvarez pudo declarar en el juicio y además, contó que «hace un par de años tuve la posibilidad de estar en el lugar donde estuvieron secuestrados «Lili» y «Bocha».
Este megajuicio tuvo como novedad que 31 imputados se sentaron por primera vez en el banquillo. Además, llegaron a esta instancia de debate oral por primera vez 97 casos que fueron reconstruidos a partir de las pruebas incorporadas al juicio y los testimonios escuchados en estos meses de audiencias.
Entre los condenados están los responsables de la Subzona Militar 15 y del Área 15.1, «La Cueva», “Cueva 2”, “Base 5”, “Subzona” “Base Naval”, los jefes de la Prefectura Naval Mar del Plata así como los jefes y miembros de la Sección Informaciones de esta fuerza. También fueron condenados miembros de la Sección Inteligencia de la Base Aérea Militar de Mar del Plata y de la Central de Inteligencia de la Fuertar.
Fueron sentenciados por haber sido encontrados culpables de los siguientes delitos: miembros de una asociación ilícita, privación ilegítima de la libertad agravada, imposición de tormentos agravada, homicidio calificado.
Los genocidas condenados
Virtom Modesto Mendiaz, condenado a prisión perpetua.
Alfredo Manuel Arrillaga, prisión perpetua.
Eduardo Jorge Blanco, prisión perpetua.
Jorge Luis Toccalino, prisión perpetua.
Carlos Alberto Suarez, prisión perpetua.
Fortunato Valentín Rezzet, prisión perpetua.
Hugo Ernesto Pabón, prisión perpetua.
Alcides José Cerutti, prisión perpetua.
Justo Alberto Ignacio Ortiz, prisión perpetua.
Eduardo Carlos Frías, prisión perpetua.
Mario Blanco Azcarate, prisión perpetua.
Alfonso Eduardo Nicolás, prisión perpetua.
Raúl César Pagano, prisión perpetua.
Alfredo Raúl Weinstabl, prisión perpetua.
Luis Héctor Bonanni, prisión perpetua.
Rafael Alberto Guiñazú, prisión perpetua.
José Omar Lodigiani, prisión perpetua.
Carlos María Robbio, prisión perpetua.
Omar Ramón Gronda, prisión perpetua.
Ernesto Davis, prisión perpetua.
Julio César Fulgencio Falcke, prisión perpetua.
Héctor Raúl Azcurra, prisión perpetua.
Oscar Ayendez, prisión perpetua.
Policarpo Vazquez, prisión perpetua.
Raúl Enrique Pizarro, prisión perpetua.
Néstor Ramón Eduardo Vignolles, prisión perpetua.
Osvaldo Gaspar Siepe, prisión perpetua.
Eduardo Héctor Vega, prisión perpetua.
Juan Eduardo Mosqueda, 25 años de prisión.
Ariel Macedonio Silva, 22 años de prisión.
Gonzalo Gómez Centurión, 12 años de prisión.
Miguel Ángel Domingo Parola , 10 años de prisión.
César Enrique Martí Garro, 10 años de prisión.
Carlos Arturo Mansilla, 7 años y 6 meses.
Juan Carlos Aiello, 7 años de prisión.
Por otra parte, resultaron absueltos Eduardo Carlos Isasmendi Sola, Juan Roberto Contreras, Silverio Abel Cortez, Juan Tomás Carrasco y Juan Alberto Rincón.