A punto de terminar la gestión de Facundo López al frente del municipio, la Subsecretaría de Participación Ciudadana publicó un resumen de su accionar desde creado el espacio, a principios del año pasado, enumerando las actividades y las políticas públicas generadas desde la dependencia.
Entre los puntos más destacables en cuanto a esta novedosa experiencia, la implementación del Centro de Atención al Vecino, con múltiples plataformas de comunicación gratuitas, deja activa una herramienta para los gobiernos entrantes que será de gran utilidad a la hora de generar un acercamiento con los habitantes del distrito.
Cabe destacar que, a través del 147, una línea telefónica fundada exclusivamente con el objetivo de recibir reclamos, denuncias y propuestas, los agentes instruidos para tal función recibieron un total de alrededor de 33 mil llamadas en poco más de un año y medio de funcionamiento, con una respuesta que llegó a alcanzar el 85 por ciento de efectividad.
Además, mediante un trabajo conjunto con la oficina de Modernización, se logró dar forma a Vos con Voz, una nueva aplicación móvil que permite a los vecinos efectuar reclamos desde su teléfono celular y personalizarlos, agregando dirección, foto y descripción de cada evento cargado.
Por el lado de las políticas públicas, y que mucho tienen que ver con la intervención de la ciudadanía en la vida del Estado municipal, el área que encabeza Marcelo Ansean logró revivir el Presupuesto Participativo, un instrumento mediante el cual fueron los propios vecinos, por medio de delegados constituidos en asambleas populares, los encargados de definir cuáles obras eran de primordial ejecución en cada uno de sus barrios.
Más de una quincena de representantes barriales definieron los treinta proyectos que serán ejecutados con fondos municipales, cuatro de iluminación ya finalizados y otros siete, de agua y cloacas, con los materiales adquiridos y listos para su colocación.
En una modalidad implementada en conjunto con el área de Juventud, esta gran herramienta también llegó durante el año en curso a uno de los grupos etarios tradicionalmente más excluidos por los mecanismos gubernamentales. El Presupuesto Participativo Joven permitió que más de 4 mil alumnos, de cada establecimiento educativo de las distintas modalidades y de todo el distrito, pudieran debatir y definir de qué manera utilizar un millón de pesos en labores y acciones que beneficien a la comunidad.
En cuanto a los procesos de inclusión y acercamiento a las zonas más vulnerables, desde la Subsecretaría se logró establecer con mucho éxito FestiBarrio, un programa que acercó actividades recreativas y culturales a los distintos espacios públicos de Necochea y Quequén, estimulando la participación de los vecinos y generando un espacio de festejo.
Fueron una quincena de intervenciones, con la presencia estimada de más de 5 mil personas, en su mayoría niños, las que marcaron a fuego este proceso; una conquista que dio lugar a la realización de Jugando en el Barrio, otra actividad dedicada a los más pequeños, pero uniéndolos exclusivamente a través del deporte.
Gracias al dedicado trabajo y el compromiso de todos los integrantes del área, estas actividades pronto tomaron una mayor envergadura, por lo que se decidió sectorizarlas para llegar a la máxima cantidad de vecinos posible.
Así nacieron los programas destinados exclusivamente a la tercera edad. Abuelos Activos, reformulando la propuesta de FestiBarrio, pero esta vez en cada uno de los centros de jubilados, llevó espectáculos y talleres a los adultos mayores de todo el distrito.
Con el objetivo de resignificar el rol de la vejez y volver a darle el espacio que merece en nuestra sociedad, a través de sus catorce ediciones el ciclo logró generar una participación activa de las personas mayores de 65 años, estimulándolos a vincularse y retomar el protagonismo.
Desde el área también se organizaron encuentros multitudinarios para celebrar el Día del Jubilado: en plena Plaza Dardo Rocha, con actividades culturales al aire libre, y con un almuerzo show.
En base a estas nuevas políticas y entendiendo la difícil situación económica por la que atravesaba este grupo etario, se buscó vincular con la Oficina Municipal de Información al Consumidor para asesorar a los centros de jubilados y sus integrantes sobre distintas exenciones impositivas que podían ayudar a paliar esta problemática y se creó la Tarjeta Más 60, una credencial con descuentos y beneficios en más de cien comercios adheridos alrededor del partido.
Emulando a su antecesora, la Tarjeta Joven, esta herramienta tuvo una rápida aceptación por parte de la comunidad, y fueron repartidas más de mil entre los adultos mayores en poco menos de seis meses.
Siguiendo esta línea, también se fundó el ciclo Tardes de Cine, un evento totalmente gratuito que tuvo por finalidad generar una conexión más fluida de los abuelos con sus nietos, a través del disfrute de una película o de una obra teatral; mientras se delineaban las bases del programa Capacitadores Mayores, un proyecto que tenía por objetivo seguir incluyendo a los más grandes mediante la transmisión de un oficio, un hobbie o una experiencia a adolescentes con pocas posibilidades de acceder a cursos o capacitaciones.
Finalmente, en los últimos meses, las necesidades que se plantearon durante el desarrollo de estos complejos procesos dieron génesis a la formación de una mesa psicosocial, integrada por voluntarios egresados de la carrera de Psicología Social, que comenzaron a trabajar palmo a palmo con los integrantes de las distintas entidades que nuclean a la tercera edad para buscar soluciones que los beneficien.