El jefe comunal, Arturo Rojas, tomó por sorpresa a ambos, a quienes les hizo entrega de un presente por el sentido de pertenencia que dichos artistas locales tienen desde hace décadas con este acontecimiento popular, mas allá de formar parte hoy del actual Ejecutivo. “Fue una noche inolvidable, con mucha gente”, expresó el Director de Cultura, quien aseguró que “sabía que había algo para Enrique, pero no para mí”
Sin dudas que uno de los momentos especiales de la primera noche del Festival infantil se dio en el escenario principal, cuando el intendente Arturo Rojas le entregó, para sorpresa de muchos, un reconocimiento al director de Cultura, Juan Gamba, y a Enrique Parisey, su compañero de tantas organizaciones de este tradicional acontecimiento popular, quien prefirió no exponerse, haciendo gala de su perfil bajo.
Tras el feliz momento, Gamba manifestó ante la prensa, aun sorprendido y con dejo de emoción, que “sabía que había algo para Enrique pero para mí no, así que no me lo esperaba, me tomó por sorpresa” para agregar que “fue una noche inolvidable, con mucha gente”.
En cuanto a la preparación para la indumentaria de los actores que representaron a la Elefanta Mara, reconoció el funcionario que “todo lo que veías acá eran puros descartes, pero con las manos del equipo que tengo lo transformamos en cosas bellas, por eso para mí es doble el orgullo”.
“Nunca digas nunca, jamás pensé volver a la Dirección de Cultura y acá estoy” respondió ante la pregunta obligada para saber hasta cuándo seguirá ligado a este festival, aunque admitió enseguida que “ya uno debe pensar en dejarle el paso a las nuevas generaciones”.
Para terminar, le dejó un mensaje al público presente: “Gracias, gracias y más gracias por apoyar siempre, y reconozco que me siento muy querido por la ciudadanía, con una mayoría de gente que me sigue, me quiere y que además me lo demuestra”, subrayó para cerrar.
Antes, y en el escenario, vale aclarar que Gamba brindó algunas palabras de agradecimiento también, sobre todo al intendente Rojas y puntualmente a la secretaria de Desarrollo Humano, Sandra Antenucci, a quien reconoció en público “por dejarme trabajar siempre con libertad, lo que hace que nunca me vaya a olvidar de vos”.