En los últimos días, comenzó a gestarse en Lobería una Asociación de Padres de personas con Síndrome de Down.
Santiago Giménez, Luján Solay y José Britos, son tres de los padres que tuvieron la iniciativa y comenzaron a convocar a otros para comenzar a darle forma a esta entidad, que les permita poder compartir experiencias, sentimientos y aprendizajes mutuos.
Al respecto, el domingo 2 de junio se llevó a cabo la primera reunión, la que resultó muy positiva, puesto que participaron más de 15 padres. Según contaron Santiago, Luján y José “participaron padres que tienen hijos muy chiquitos hasta otros con hijos de más de 40 años”.
Según explicaron, la idea es conformar la comisión en la próxima reunión, que se llevará en la Casa de la Cultura el domingo 14 de julio. Posteriormente, la idea es reunirse mensualmente el primer domingo de cada mes.
Según contaron, la idea surgió tras algunas reuniones que sostuvieron con personas de Necochea que también están tratando de conformar una asociación similar.
El objetivo es mejorar la calidad de vida de sus hijos, a través de la inclusión de las personas con síndrome de Down en la atención temprana, la educación, el trabajo y la vida independiente.
Según explicaron, la iniciativa es poder brindar contención, información y capacitación a los padres y familiares de personas con síndrome de Down, además de compartir experiencias.
Una vez conformada la Asociación, pretenden generar diversas actividades e trabajar con profesionales que puedan darles herramientas para cumplir con sus metas.
¿Qué es el Síndrome de Down?
Es una alteración genética que se produce en el momento de la concepción y se lleva durante toda la vida. No es una enfermedad y uno de cada mil niños nace con este síndrome. Sus causas son desconocidas. Cualquier pareja puede tener un hijo con Síndrome de Down.
Esta alteración, también llamada trisomía 21, hace que dentro de los 23 pares de cromosomas que todas las personas tenemos, aquellas con Síndrome de Down tengan 3 cromosomas en el par número 21. Debido a esto, las personas con este síndrome tienen discapacidad intelectual. Y, si bien tienen rasgos parecidos a los de sus padres, como cualquier otra persona, hay algunas características físicas que pueden aparecer como asociadas al síndrome.
Algunas de las características físicas más comunes son tonalidad débil de los músculos, nariz chata, ojos rasgados, orejas pequeñas, baja estatura y boca pequeña.
Los niños con Síndrome de Down podrán desarrollar todo su potencial de aprendizaje y seguirán los mismos pasos que el resto de los niños, aunque más lentamente. Dependerán, fundamentalmente, de una familia sólida que les brinde amor y pertenencia.
