Finalizada la temporada de anchoas, pero todavía con mucho trabajo por delante, las cooperativistas hicieron un balance altamente positivo de este 2018 y agradecieron las gestiones municipales que ayudaron a posicionarlas nuevamente como una planta procesadora de referencia. “Este año fue uno de los mejores, con una producción superior a la del año pasado y casi 220 mujeres trabajando”, explicaron.
Desde comenzada la gestión de Facundo López al frente de la Municipalidad de Necochea se ha hecho especial hincapié en la recuperación del sector pesquero como un motor de la economía y potencial generador de nuevas fuentes laborales. En ese proceso fueron principales protagonistas los cooperativistas de Engraucoop, antes una fábrica procesadora de anchoas tradicional de nuestro Distrito que cerró las puertas dejando en la calle a cientos de trabajadores, y que renació gracias al sacrificio y la perseverancia de un puñado de mujeres que resistieron.
Finalizada la temporada de pesca en nuestras costas, Analía Morino, gerente coordinadora de la planta, afirmó que “este año fue uno de los mejores, estuvimos dos meses sin parar, con una producción superior a la del año pasado y casi 220 mujeres trabajando”.
Caminando junto a sus compañeras para retomar las actividades en planta luego de una parada prevista para el almuerzo, la asociada de la pujante cooperativa contó que “hace tres años que estamos trabajando con esta gestión, que nos ha dado una mano muy importante, ya sea en el tema de las lanchas o en otras cosas. Se han portado muy bien con nosotros y estamos trabajando a full”.
Sobre el crecimiento de Engraucoop desde la reactivación de la captura de anchoas, hecho que surgió de un fuerte trabajo desde el área de Pesca municipal y que involucró en primera persona al intendente Facundo López, “la producción demanda cada vez más chicas. En este momento, que ya se terminó la temporada, estamos con 108 mujeres más los varones que nos acompañan en las tareas de mayor esfuerzo físico”, explicó Analía.
Mientras tanto, en la planta de la cooperativa, que ofrece su servicio a modo de mano de obra tercerizada, las mujeres no paran de trabajar, llevando adelante una tarea artesanal para descabezar y clasificar cada pescado. “En temporada, la lancha viene directo acá, (la anchoa) pasa por el saladero y después a las mesas”, reveló sobre la generalidad de la faena la gerente.
Antes de comenzar a recorrer la planta, Alejandro Jacín, coordinador de Pesca municipal y encargado de seguir de cerca los adelantos de la cooperativa, brindando el apoyo del Estado municipal para lo que se necesite, subrayó que “es un orgullo para Necochea y para toda la población que podamos contar con una fábrica de este tipo, donde se ha generado mucho empleo. No fue fácil, porque siempre existen trabas, pero con gestión y tenacidad logramos que, año tras año, vaya mejorando un poco”.
Adentrándose en el terreno de los agradecimientos, el titular del área productiva mencionó a “la gente de SUPA, que jamás nos puso una traba para que podamos trabajar; y al Consorcio (de Puerto Quequén), que nos presta el muelle para que las lanchas ingresen y no se les cobre absolutamente nada”.
Sobre el impulso que ha tenido la pesca desde iniciada la gestión de Facundo López como máximo mandatario comunal, Jacín reveló algunos de los trabajos que se hicieron en silencio para traer lanchas desde otras ciudades y permitir esta realidad. “Las embarcaciones tuvieron que hacer un cambio de puerto de asiento, que antes tampoco estaba permitido y llevó una serie de trámites bastante importantes en la Provincia. Ahora pueden operar libremente y esto ha logrado que la gente de Necochea, con sus embarcaciones, se pueda trasladar al puerto que mejor les cuadre dentro de donde esté la captura”.
Y aclaró que la idea es incrementar las temporadas de captura, cuestión que se ve dificultada porque nuestro puerto no cuenta con una planta procesadora de otro estilo, por ello “las lanchas hacen la anchoa y se vuelven a Mar del Plata”, aunque “seguramente en febrero tengamos unas 5 o 6 que hagan la pesca variada”.
Con respecto al futuro, el coordinador de Pesca afirmó que “las expectativas para el año que viene son mucho más altas que las de este año, terminamos una temporada y ya empezamos a gestionar para la que viene”.
Pero destacó, fundamentalmente, que “tenemos que seguir dándole mucho empuje a esta fábrica, que ha sido recuperada por trabajadoras, en su mayoría chicas que son sostén de hogar y que la pasaron muy mal para poder llegar al lugar que están hoy”.
Por ello, para la gestión municipal, “es un orgullo eso, porque fueron mujeres las que lucharon, las que permanecían 24 horas acá adentro (de la planta) para no perder la fuente de trabajo. Eso tiene que ser un orgullo para la ciudad y obviamente para ellas, que hoy pueden gozar de un trabajo genuino”.