El presunto femicida de Mónica Vedda, quien se encontraba detenido en la Comisaría Primera de Tandil, fue hallado muerto en su celda. Médicos forenses, el fiscal y autoridades policiales se encontraron en el lugar recabando información para determinar la hora y causa del deceso. Todo apunta a muerte por suicidio. Mariano Leopoldo Wanderkauven, de 42 años, tenía antecedentes de violencia de género y, de confirmarse su responsabilidad en el asesinato de Vedda, ocurrido el 12 del corriente, iba a enfrentar una condena a cadena perpetua.
Marcela Mónica Vedda, de 54 años, era madre de dos hijos y trabajaba como repartidora para una aplicación de delivery en Mar del Plata. Días atrás, su cuerpo fue encontrado en el albergue transitorio «Los Alerces» de Tandil. La autopsia reveló que la causa de muerte fue estrangulamiento, y todos los indicios apuntaban a su pareja.
Wanderkauven, con quien Vedda mantenía una relación desde hacía aproximadamente cinco años, fue el principal sospechoso desde el inicio de la investigación. Tras el asesinato, intentó regresar a Mar del Plata, pero no contaba con su documento de identidad. Al acudir a la Comisaría Primera para denunciar la pérdida del documento y obtener una constancia que le permitiera viajar, fue detenido.
La relación entre Vedda y Wanderkauven estaba marcada por un ciclo de violencia intermitente. El último episodio, que culminó en el asesinato de Vedda, ocurrió en el hotel alojamiento donde la pareja había llegado desde Mar del Plata para pasar el fin de semana. Testigos del albergue declararon haber escuchado una fuerte discusión, pero no intervinieron. Poco después, alrededor de las 4,45, el personal del establecimiento halló el cuerpo de Vedda tendido en el suelo de la cochera de una de las habitaciones, junto a la moto con la que habían llegado. La autopsia confirmó que la causa de muerte fue asfixia mecánica por compresión de los vasos del cuello.
Las cámaras de seguridad registraron a Wanderkauven abandonando el albergue a las 4:26. Los oficiales de la Comisaría Primera comenzaron su búsqueda basados en esas filmaciones, pero el sospechoso finalmente se entregó al intentar realizar la denuncia en la misma comisaría.
Tras su arresto, Wanderkauven se mantuvo en silencio, incluso durante la declaración indagatoria ante el fiscal. Finalmente, el fiscal solicitó su detención formal por homicidio agravado por el vínculo, en un contexto de violencia de género. Wanderkauven permaneció detenido en un calabozo de la Comisaría Primera hasta el mediodía de este martes, cuando se conoció la noticia de su muerte.
Fuente: LU22