Lo logrado por Miguel Gargaglione en San Cayetano, debería ser materia de análisis, puesto que después de tres períodos como intendente, sigue manteniendo un nivel de adhesión en la población que sorprende.
Y cuando hablamos de «sorpresa», no es porque la gestión del intendente no amerite un respaldo tal, de hecho no es el objetivo de esta publicación evaluar que tan bueno, malo o regular fue su gobierno, sino que el fin es analizar el «fenómeno» que lo ha llevado a ganar una elección tras otra, estableciendo récords de acompañamiento.
¿Qué es lo que llama la atención? Que después de tres gestiones al frente del municipio, con el desgaste que ello supone, vuelva a convertirse en el intendente con mayor porcentaje conseguido en toda la Provincia.
Una vez más, tal como había sucedido en 2015, Gargaglione alcanza el 70 por ciento de los votos, lo que lo encamina a una segura reelección en octubre.
Y ese porcentaje, no sólo lo consigue después de gobernar 12 años, sino que además, lo hace ante una única lista opositora y en un contexto absolutamente desfavorable de su espacio político en la Provincia y en la Nación. Tal es así, que el intendente sacó en San Cayetano 885 votos más que Macri y 558 sufragios más que Vidal.
