El efectivo policial que había sido aprehendido el viernes pasado, acusado de ser uno de los autores de dos asaltos en Arenas Verdes, quedó formalmente detenido, tras el aval de la Justicia de Garantías, encontrándose en un calabozo de la sede de la DDI Necochea.
El juez de Garantías, Aldo Rau convirtió la aprehensión en detención bajo los cargos de “robo doblemente calificado por poblado y banda, agravado por el uso de arma de fuego y por la calidad de funcionario policial”.
A su vez, los investigadores siguen trabajando sobre el hecho, siendo los otros tres principales sospechosos, tres policías, que al igual que el detenido, son foráneos y prestaban servicio en el marco del Operativo Sol, en Arenas Verdes y Necochea.
El detenido, identificado como oficial inspector Martín Ezequiel Lencina, vio más complicada aún su situación, después que algunos de los damnificados en el robo, reconocieran algunos de los elementos que les fueron exhibidos, como chalecos, armas y calzados, que habían sido secuestrados en un allanamiento. Entre lunes y martes, las víctimas de los robos deberían realizar nuevos reconocimientos.
Lencina habría prestado declaración ante el fiscal Carlos Larrarte, negando su responsabilidad en los hechos. El acusado habría afirmado que al momento de los hechos, él no se encontraba en el lugar y aportó el nombre de otra persona en su intento por demostrar su inocencia.
En cuanto a la situación de los otros tres policías investigados, se sabe que les fueron retiradas las armas reglamentarias y que quedaron cesados de sus funciones en los lugares que tenían asignados, aunque el allanamiento realizado en el camping en el que se alojaban, no aportó las pruebas necesarias para pedir su detención.
En cuanto a los teléfonos celulares de los sospechosos, están en poder de la Fiscalía de Delitos Complejos, que aguarda la autorización para su análisis, incluida la apertura de antenas de telefonía móvil para determinar cuál era la ubicación de esos aparatos la noche en que se cometieron los robos a mano armada.