El Polo Productivo Municipal es un espacio que genera oportunidades. Albergando a las cooperativas formadas en el marco del programa del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Argentina Trabaja, el espacio ha ido poco a poco recobrando sus fuerzas gracias a una renovada visión del potencial valor que nuclea, y esa ha sido una tarea afrontada por el intendente Facundo López, desde el inicio mismo de su gestión.
Coordinado su accionar través de la Subsecretaría de Producción e Innovación Tecnológica municipal, área que encabeza Leonardo Ruggiero, los trabajos que se generan en el predio han crecido de una manera exponencial. Allí, se desenvuelven cuatro cooperativas. Mientras una se dedica a la fabricación de aberturas en aluminio -“Mujica II”-, otra produce bloques articulados -“Rivera Quequén”- y un grupo de jóvenes, “Servicios Integrales”, se ofrecen de lleno para brindar distintos servicios para el municipio.
Esforzándose desde temprano por mejorar la limpieza de las calles de Quequén, los integrantes de “Mujica I” integran el programa nacional desde hace unos cinco años, desempeñando una doble tarea: por la mañana se dedican íntegramente al barrido y, pasado el mediodía, vuelven a producir distintos materiales en el Polo.
“Empezamos haciendo baldosas y después nos dieron, por nuestra labor y por cómo trabajamos, esta nueva tarea”, relata la presidenta de la cooperativa, Estela Laguna, mientras palea arena sobre uno de los badenes de la calle 502. Y toma aire para continuar explicando: “de 8:30 a 12.30 hacemos el trabajo de barrido y de ahí en más continuamos en el Polo Productivo, donde producimos baldosas y estamos comenzando con la producción de bancos, para que las plazas y los espacios públicos queden lindos y tengan algo de lo que producimos las cooperativas”.
También cuenta que las 14 mujeres que conforman el grupo están trabajando desde hace cinco años juntas y que “se van agregando ahora algunos hombres, pero hasta hace poco eran solo dos”. Al igual que Perla Marchane, titular de “Rivera Quequén”, Estela insiste en destacar que “la ‘Mujica I’ más que una cooperativa es una familia”, por ello “tratamos de que todos estén cómodos, tratamos de ayudarnos cuando nos pasa algo”.
“Nosotros queremos hacer más grande la Cooperativa. Ayudar a la gente que necesite con nuestro trabajo y, algún día, poder trabajar de lo que elaboramos”, afirma ilusionada.
Conversando sobre la relación que se ha establecido con los quequenenses y resaltando una de las cualidades del grupo, la presidenta explica que, en algunas oportunidades, “los vecinos nos ven barriendo y dicen ‘pobres mujeres’, a lo que nosotros paramos y les respondemos: ‘este trabajo lo elegimos nosotros’, aunque no lo quieran creer”.
“El barrido, hacer fuerza, levantar bolsas, estar a la mañana cuando hace frío, lo elegimos nosotros, porque es digno el trabajo, y mientras sea digno cualquier trabajo es bueno”, asevera levantando la voz.
“Aunque no quieran creer, llegamos a trabajar alegres. Las chicas, a pesar de que son todas mamás, todas tienen sus cosas en las casas, vienen a cumplir su horario trabajando a la par de los hombres. Eso es lo bueno, no es que porque seamos mujeres nos discriminan. Nosotros les recordamos que somos mujeres y podemos trabajar igual que los hombres.”
Preparándose para volver a poner el hombro en las tareas que realiza diariamente, Estela piensa un rato y enseguida pide poder dejar un mensaje para aquellos que actualmente se encuentran desempleados o pasando un momento complicado: “nosotros tuvimos un año esperando, ninguna tenía laburo, era todo para abajo. Pero cuando realmente uno quiere trabajar busca la forma. No hay que cansarse nunca de golpear puertas, porque siempre hay alguien para tender la mano. Como a nosotros, que en su momento nos dio una mano el municipio y que, hoy por hoy, nos sigue apoyando a través del intendente Facundo López, que ve nuestras ganas de trabajar y nuestra fuerza”.
“La gente que no baja nunca los brazos tiene la posibilidad de conseguir un trabajo bueno, yo les aconsejo que sigan luchando porque lo último que se pierde es la esperanza”, afirma la referente de ‘Mujica I’ mientras se acerca nuevamente a sus compañeros, intentando no alejarse mucho del grupo y para no perderle pisada al trabajo. Tal como transcurre cada día y con cada uno de los integrantes de la Cooperativa.