El ministro de Economía Luis Caputo envió el adelanto de Presupuesto 2025 al Congreso. Lo hizo como previa a lo que será la ley para la administración pública, que debe presentarse antes del 15 de septiembre y como forma de dar señales en medio de la tensión cambiaria. El plan tiene 4 ejes prioritarios y habla por primera vez en las últimas semanas de lograr condiciones de crecimiento. Para 2024 la caída será del 3,5%/PBI.
El dólar este año se eleva a $ 1016,1 (+58,3% interanual) y la inflación proyectada es 139,7% interanual para diciembre de 2024, “una baja promedio del tipo de cambio real (TCR) bi- lateral de -2,3% en el año”. Promete seguir “profundizando el mercado de capitales”, mejorar herramientas para el sector privado y respetar “los marcos de sostenibilidad de la deuda pública”.
“Una reducción del déficit sumado a un mayor financiamiento en moneda doméstica y de Organismos Internacionales y Bilaterales de crédito permiten evitar las transferencias del BCRA al Tesoro Nacional”, enfatiza para mantener el corte del financiamiento monetario mientras abre la puerta a la llegada de fondos del exterior.
El Presupuesto 2025 planteará “metas fiscales que se basan en el mantenimiento de las políticas que apuntalan la demanda agregada” mientras que calcula que habrá “un incremento de los recursos fiscales de la mano de un aumento de la actividad, del empleo y de los ingresos reales” para darle “sostenibilidad al crecimiento con baja del déficit fiscal.
En término de los dólares para este año, calcula exportaciones por u$s 95.397 millones, un 14,4% más que el año anterior, mientras que las importaciones se derrumbarán un 20% hasta los u$s 73.449 millones. Así, el saldo comercial dejará casi u$s 22.000 millones en 2024 según las estimaciones del Ministerio de Economía.
El pr o y e c t o t a m b i é n anticipa que habrá una mayor recaudación en 2025, un 54,4% respecto a la recaudación proyectada para el año 2024 y augura una baja de la presión tributaria, que pasaría de 21,61% del PIB en el año 2024 a 21,16% en el año 2025. Entre las bajas destaca la “finalización de la vigencia del impuesto PAIS”.
Equilibrio fiscal
En el primer punto, Caputo detalla que el “equilibrio fiscal sostenido”. Para 2025 plantea “mantener las condiciones de estabilidad macroeconómica que permitan el despegue definitivo de las potencialidades productivas del país, generando un ambiente favorable para el incremento de la inversión privada, una mejora de la productividad, y el crecimiento de la actividad, del empleo y los ingresos”, anticipó el ministro.
La calidad del ajuste
En el segundo eje indicó que es prioritario seguir con el “déficit cero” y mejorando la “eficacia y eficiencia del gasto público”. El énfasis está puesto “en la reducción del gasto político para dar prioridad al sostenimiento de ingresos de los sectores de mayor vulnerabilidad”, indicó el mensaje de Caputo en línea con lo que le reclama el Fondo Monetario Internacional (FMI) que pidió calibrar la “calidad” del ajuste.
Modernización
El mensaje que se envió a la Cámara de Diputados marca como tercer punto la “modernización y simplificación del Estado”, ocupado en “sus funciones esenciales para no entorpecer las condiciones para el desarrollo del sector privado, favoreciendo la libre empresa”, con simplificación de las acciones y procesos, digitalizando y simplificando trámites, des- burocratizando y eliminando intermediarios en sus acciones”.
Defensa
El último eje contrasta con las áreas prioritarias que podrían haberse señalado en años anteriores, como educación o salud. Señala que hay que “contar con Fuerzas Armadas capaces de defender sus fronteras y erradicar o desalentar posibles amenazas externas” y suma a fuerzas federales para “garantizar la seguridad interior para la prevención del delito y la investigación del crimen organizado”.