Un problema que databa desde hacía años y que era un reclamo permanente de los quequenenses fue corregido por distintas cuadrillas dirigidas por el Corralón de la localidad y por solicitud del intendente Facundo López, quien puso a disposición de los vecinos todos los recursos con los que cuenta la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, con el fin de continuar brindando soluciones concretas.
Detectada la raíz del inconveniente, que dejaba bajo el agua toda una calle ante la caída de cualquier precipitación, los operarios municipales procedieron a la extracción de dos árboles ubicados en calle 541 entre Avenida Benedicto Campos y 580, que obstruían una boca de tormenta y que eran el eje principal del conflicto.
En la zona, además, se realizó el recambio de los pluviales dañados y la limpieza de los restantes y se volvió a construir la boca de tormenta dañada por las raíces de los ejemplares extraídos.
Finalmente y para brindar una buena solución a los habitantes del lugar, maquinaria municipal realizó el entoscado de la arteria, desde la Avenida y hasta la intersección con calle 582.
“Era un problema que venía desde hacía mucho tiempo, la calle se inundaba a raíz de que la boca de tormenta estaba obstruida por las raíces de dos árboles. Procedimos a la extracción de un álamo y un sauce, cambiamos y limpiamos la cañería, reconstruimos la boca de tormenta y reparamos la calle”, explicó al respecto Pablo Bugando, a cargo del área ejecutora.
