Gran sorpresa se llevaron los miembros de la Asociación Cooperadora de la Escuela Nº 42 al descubrir el faltante de adoquines del cantero que está en la esquina de la institución.
Esto que parece un chiste, es real.
Aca no se trata del valor económico, que sin dudas lo tiene. Se trata del poco valor y de la poca conciencia que tienen los demás con respecto a lo público. “Como es de todos, termina siendo de nadie, y si no es de nadie, me lo puedo llevar”.
Causa mucha pena que haya personas sin valores y que se sientan con derecho a tomar cosas ajenas. Y de una escuela, más triste aún. Seguramente han armado un cantero, un piso, o quien sabe qué. El hecho es que necesitaron algo, vieron que esos adoquines podían servir, y se los llevaron. Así de simple. Sin ningún respeto por lo ajeno.
Por suerte son más las personas dedicadas a construir que a destruir, más las que aportan que las que roban, más las que tienen valores que las que carecen de ellos. Pero cosas cómo estás molestan. Ojalá dejen de ocurrir.