Por licenciada Rocío Iglesias, matriculada del Colegio de Kinesiólogos de la Provincia de Buenos Aires (CoKiBA), experta en acupuntura.
Está considerada como la práctica más antigua para los tratamientos del dolor y cada vez se extiende más entre los profesionales de la kinesiología. Los kinesiólogos estamos habilitados para utilizar acupuntura en los tratamientos convencionales, una práctica milenaria de la medicina tradicional china.
Puede ser muy beneficiosa por su gran efecto analgésico y por no tener efectos adversos y además puede combinarse eficazmente con otros tratamientos y permite disminuir o erradicar, dependiendo del caso, la toma de calmantes.
Según la Resolución del Ministerio de Salud de la Nación (N° 859), los kinesiólogos y fisioterapeutas, como profesionales de la salud, estamos autorizados a aplicar ese procedimiento en los tratamientos. No obstante, posterior a la carrera de grado, los especialistas contamos con una formación, que viene creciendo entre los matriculados como terapéutica.
La acupuntura se utiliza como terapia principal o coadyuvante en el tratamiento, según lo decida el profesional luego de evaluar al paciente, que en general, llega derivado para recibir un tratamiento que alivie el dolor.
Está demostrada mayor efectividad en los tratamientos del dolor muscular. Por ejemplo las contracturas, artrosis, dolor en la articulación temporo-mandibular, bruxismo, cefaleas, cervicalgias, lumbalgias y tendinitis.
En la actualidad existe evidencia científica de calidad que “avala” los siguientes efectos para tratar el dolor: efecto antiinflamatorio, secreción de sustancias analgésicas y aumento de la circulación local.
La acupuntura se puede utilizar en cualquier diagnóstico kinésico, siempre que se respeten las contraindicaciones como es la fobia a las agujas. En este caso no deberían aplicarse bajo ningún concepto, ya que el paciente podría no tolerarlo. Además hay que tener cuidado en pacientes anticoagulados y en embarazadas. Antiguamente no era recomendado en niños pequeños, pero actualmente contamos con mayor evidencia de la efectividad en dicha población, inclusive en bebés.
El tratamiento kinesiológico con esa alternativa de la medicina china consiste en la aplicación de finas agujas en ciertas zonas del cuerpo conocidas como puntos de acupuntura. De acuerdo con la afección que presente el paciente, el profesional decidirá cuáles puntos utilizar en cada tratamiento. La punción estimula ese punto en el que se coloca, y así se logran los efectos deseados.
Vale destacar que la acupuntura no reemplaza a los tratamientos kinesiológicos convencionales, pero sí es una manera diferente y eficaz para tratar determinadas problemáticas. Depende del criterio del profesional el tratamiento a aplicar. La acupuntura es un procedimiento dinámico y muy útil en cuadros que no revierten con los procedimientos habituales.