Algunos son de venta libre, otros de venta bajo receta. Muchos están en los botiquines de nuestras casas y solemos recurrir a ellos más a menudo de lo que debiéramos. ¿Cuáles de estos mitos son verdad y cuáles no acerca de los medicamentos y sus usos?
No puedo beber alcohol si estoy tomando antibióticos.
El alcohol es una droga como cualquier otra, que ingresa al tubo digestivo, pasa a la sangre y luego se traslada a los diversos sitios en donde genera sus efectos, principalmente al cerebro. Al cabo de un tiempo se metaboliza en el hígado para perder su efecto.
Los medicamentos, por su parte, atraviesan el mismo proceso: pasan del tubo digestivo a la sangre y de allí a los sitios en donde tienen su efecto.
No todos los antibióticos interaccionan con el alcohol. El problema puede presentarse cuando se ingieren en simultáneo y son metabolizados en el hígado por las mismas enzimas (proteínas que aceleran reacciones relacionadas con el metabolismo).
No obstante, no hay que tomar alcohol sin asegurarnos de que no existe incompatibilidad, ya que algunos antibióticos pueden interaccionar con él, alterando su efecto y eficacia. Lo recomendable es preguntarle al profesional cómo interacciona la medicación que receta con el alcohol.
Paracetamol, ibuprofeno o aspirina, ¿es lo mismo y no tienen efectos adversos?
Fiebre, dolores musculares, dolores de cabeza o migrañas parecen ser sólo algunas de las afecciones por las cuales se acude (muchas veces, indiscriminadamente) a este tipo de medicación.
Ahora bien, ¿cuándo debés usar cada uno? El ibuprofeno suele ser más eficiente en casos febriles e inflamatorios. En cuanto al paracetamol, es el que tiene menos efectos adversos. Por su parte, la aspirina tiene bastantes contraindicaciones. No obstante, los tres deben ser prescriptos siempre por un médico tratante y basarse según su indicación.
A pesar de su venta libre, es importante que siempre se haga la consulta médica correspondiente para una adecuada valoración de los signos y síntomas que presenta el paciente con el fin de poderse establecer la mejor estrategia para el manejo farmacológico de los mismos.
Justamente la posibilidad de comprar esta medicación sin la necesidad de tener una receta médica abre la polémica sobre el uso y abuso de estas drogas. Por ello, es importante saber que tanto el paracetamol como la aspirina, como el ibuprofeno tienen contraindicaciones. Este tipo de medicación, si bien es de venta libre, no es inocua si se administran dosis que no son las correctas.
¿Las vitaminas engordan?
Si hay un mito extendido entre hombres y mujeres de todas las generaciones es la idea de que » las vitaminas engordan». Pero las vitaminas no engordan porque no poseen valor calórico. Incluso son recomendadas como suplementos en dietas hipocalóricas estrictas.
Cuando tenemos un déficit o nivel bajo de vitaminas, nos encontramos cansados, nuestro rendimiento disminuye, nos fatigamos rápidamente, e incluso nos convertimos en inapetentes. Hay personas que dejan de tener ganas de comer, en estos casos, en cuanto se recuperan los niveles normales, y nos empezamos a encontrar físicamente bien, el apetito vuelve a aparecer. Pero no aparece en mayor medida que antes ni aumenta si nunca habías perdido el apetito.
Pero cuidado, cuando llevas una alimentación equilibrada y variada, no hay porqué suplementar la dieta con vitaminas porque las tomas en la comida.
Cualquier duda consulte a su médico o farmacéutico
VERDAD. Se debe entender un medicamento como un instrumento de salud y no como un bien de consumo, por lo cual, su uso debe adecuarse de cada individuo.
La automedicación, es decir, la administración por cuenta propia de un medicamento es un hecho cotidiano y habitual en nuestra sociedad que se da en la mayoría de los hogares.
Es importante tener en cuenta que cada persona reacciona de forma distinta ante un mismo fármaco y que, además, las características de su enfermedad no son equiparables a las de otro paciente.
Medicación responsable es la toma de un medicamento bajo el consejo de un médico o farmacéutico.
Agustina Zubiri – Farmacéutica.